Karajishi
El tigres solía ser considerado como el rey de los animales en la antigua China, pero cuando se empezaron a conocer los leones a través de la Ruta de la Seda, estos tomaron su lugar privilegiado. Los leones se valoran también como el símbolo de la realeza - no sólo en China sino también en Egipto e India, donde estatuas de leones fueron colocadas en los palacios de sus dinastías representando el poder del rey y la protección que se merece.
Karajishi es un león imaginario introducido en Japón por la dinastía Tang (siglos VII-X). Tanto en Oriente como en Occidente, el león se ha considerado como un valioso animal de la suerte que evita el mal, atrae la felicidad y promueve la alegría. Los dos leones y las bolas de colores que se muestran en la pieza son amuletos que hacen los sueños realidad y llevan alegría y fortuna.